La basílica de la Santa Cruz es una destacada basílica gótica italiana levantada en la ciudad de Florencia. Se empezó a construir el 3 de mayo de 1294 sobre las ruinas de una pequeña iglesia erigida hacia 1222 por los franciscanos, en vida de San Francisco de Asís. El maestro de obras fue Arnolfo di Cambio, quien recibido el encargo de reemplazar la pequeña iglesia anterior por una más grande, que superara a Santa María Novella, iniciada 50 años antes por los dominicos.[2]
Fue consagrada el 6 de enero de 1443, según el calendario florentino; 1444, según el actual.[3] Fue declarada basílica menor el 20 de diciembre de 1933.[1]